ALIEN: Covenant

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lunes, 19 de mayo de 2014

GODZILLA: el regreso el Lagarto Rey.

Redacción de POP CORN CINEMA, el Blog del Cine en Colombia.
Por Jaime Ponce (Miembro de la Asociación colombiana de Críticos y Periodistas del Cine ACOPECINE) Derechos reservados®, prohibida su copia o reproducción parcial o total, sin autorización de su autor. Registro1-2012-17127 de la Dirección Nacional de Derechos de Autor Colombia.



Gareth Edwards nos trae nada más y nada menos que una joya para los amantes del rey de los monstruos. En esta entrega ha quedado más claro que nunca, es el rey de los monstruos y tras haber visto esta maravilla solo puedo decir: ¡larga vida al rey!

El monstruo que aterrorizo a Japón, que nació del miedo colectivo a la bomba atómica, el mismo capaz de destruir y borrarlo todo a su paso, son los eventos que marcan su trágico origen. Regresemos al pasado en su película original Gojira (1954) el monstruo debe su origen gracias a las pruebas nucleares, en Godzilla (1998) del Roland Emmerich la historia tampoco cambia, pero… para esta nueva versión libre, este es uno de los pocos puntos en que Godzilla de Gareth Edwards no acude a sus génesis predecesoras.

La película inicia con una serie de imágenes que de inmediato nos sumerge en una ola de eventos catastróficos, todos ellos de tipo nuclear, una fórmula que desde su inicio le llega como “anillo al dedo” para justificar el como un sencillo y muy pequeño “lagarto” logra convertirse en uno de los tres grandes íconos de la historia del cine junto al memorable King Kong y el insuperable ALIEN de Sir Ridley Scott y aunque es cierto que para lograr un mejor desarrollo del guión que logre involucrar a los humanos como “víctimas de la tragedia”, esta historia recurre de nuevo al momento justo en el que: el  padre busca e intenta reunir a su familia en un ambiente extremadamente hostil, aunque no busca en ningún momento la lagrima sensacionalista.


LA HISTORIA:
Esta nueva entrega arranca con un hallazgo arqueológico y una catástrofe nuclear en la que Bryan Cranston interpreta a Joe Brody, un físico nuclear que vive y trabaja con su familia en Japón. Pasan los años y tras la catástrofe su hijo Ford Brody, puesto en escena por Aaron Taylor-Johnson ha crecido, ya es un teniente militar y tiene su propia familia con la que vive en San Francisco (la nueva ciudad estadounidense que es destruida). Por otro lado, su padre sigue intentando demostrar que lo que paso en Japón, no fue un terremoto, sino otra cosa. Juntos y con la ayuda de un Doctor japonés, revelaran que lo que se avecina, es una guerra entre dos especies de depredadores que vivieron hace miles de años.

LA CRITICA:
Aquí inicio en mi libre oficio lo que es y significa para todos y cada uno de nosotros el regreso del mounstro, al que recuerdo muy bien cuando desde muy pequeño en las divertidas jornadas del “Matinée” que programaba la pequeña cinemateca que existió en uno de mis dos barrios natales, Usaquen, allí lejos de toda realidad y sumergido en la fantástica imaginación que desde pequeños ponemos en práctica, recreaba como podría impactar en mi vida la llegada de un súper Lagarto a mi ciudad, Bogotá, (la misma que en algunos sectores pareciera como si en realidad hubiera sido visitada por Godzilla, por aquello de calles destrozadas y etc..etc..) en casa mis juguetes y en especial mi entrañable Oso de peluche era el “mounstro en cuestión”,  las impactantes imágenes  en Blanco y Negro de un Godzilla, articulado cuadro por cuadro lograban su objetivo, sembrar el recuerdo imborrable.
Reconozco que la cinta es una autentica maravilla para disfrutar tanto a nivel de obra que rinde homenaje claramente al monstruo original de la película de 1954 Gojira o titulada en otros países como :  Japón bajo el terror de un monstruo y su cada vez más sorprendente diseño, así como en las destrucciones y otros elementos clásicos del cine apocalíptico que se lograran cautivar la emoción del momento.


A nivel audiovisual y, después de ver lo que logró con Monsters (2012) casi por si solo, ya que también fue responsable de los efectos digitales y también la fotografía, es fácil entender que el director escogido haya sido Gareth Edwards, quien logra componer una secuencia de planos perfectos, para luego aderezar con dulces efectos especiales de última generación y aunque su estrategia, es emplear la técnica de sugerir situaciones que cada vez genera más tensión con el desarrollo de la historia y que sabes que finalmente acabaras recibiéndolas, si encuentro una falencia clara, abrupta, digo yó, en momentos cruciales como los combates de GODZILLA Vs insectos que terminan, en dos oportunidades, reducidos a la pantalla de un televisor, absurdo realmente, puesto que con estos cortes simplemente acaba, mutila, la emoción.
En cuanto al CGI claramente destaco el realismo de las batallas, las criaturas, los escenarios, las destrucciones y en especial el clásico rugido del lagarto, que esta vez es más profundo, similar al anterior, pero con un ronquido que atemoriza, todo esto corre a cargo de MPC y Double Negative, dos gigantes de los efectos digitales aunque el uso del 3D fue innecesario, pues solo logra profundidad de campo, más No escenas invasivas que logren hacernos mover de la silla.

En cuanto a interpretaciones, Bryan Cranston una vez más admirable!, al igual que Aaron Taylor-Johnson y Elizabeth Olsen quienes cumplen en todo momento y la música a cargo de Alexandre Desplat funciona muy bien en su mayoría, hasta que llega la escena que marca el momento de descenso de los militares en un San Francisco apocalíptico, será mi impresión pero es una copia? o toma ejemplo de los espeluznantes coros de voces de la obra maestra de Stanley Kubrick: 2001: una odisea espacial, en las escenas donde aparece la placa de monolito frente a primates. Repásenla y verán a que me refiero.


Como ya he dicho es un película digna de disfrutar en el cine que recomiendo ver en la pantalla más grande que la proyecta IMAX, por ejemplo.