Redacción de POP CORN CINEMA, el Blog del Cine en
Colombia.
Por Jaime Ponce (Miembro
de la Asociación colombiana de Críticos y Periodistas del Cine ACOPECINE)
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Cuando pequeño, recibí de mi Padre un libró que
cambió, en aquel entonces, mi manera de leer y elegir la literatura que me
gustaba, me refiero a la obra de J. R. R. Tolkien. Desde entonces esa pequeña
colección de libros, que sumaban 6 en total, se convirtieron en mi absoluta
compañía, recuerdo que cada vez que tomaba uno de estos libros, lograba
sumergirme hasta lo más profundo de mi imaginación, para crear estos mundos,
sus personajes y los lugares donde todo ocurría. Es por esa razón que desde el
inicio de este viaje, llevado de manera casi magistral por el realizador neo
zelandes Peter Jackson, sigo con total interés cada una de sus películas.
Mis recuerdos han
logrado despertar con cada una de sus películas, la adaptación de la obra al
Cine y sus personajes tan extraordinariamente bien recreados, que en ocasiones
logra superar mi imaginación.
Ahora, el turno es para
El
Hobbit: La desolación de Smaug.
LA
HISTORIA
En la nueva película que marca el regreso de
Peter Jackson para la puesta en escena de la gran obra cumbre de la literatura
fantástica, Thorin Escudo de Roble (Richard Armitage) junto con Bilbo, trece
enanos y Gandalf (Sir Ian McKellen) continúan en su accidentado camino hacia
Erebor, donde buscan reclamar el reino que les fue arrebatado por el temerario e imponente último gran Dragón, Smaug (con la impresionante voz del actor ingles Benedict
Cumberbatch).
LA
CRITICA
Mucho se habló y criticó
sobre la primera parte de esta nueva trilogía producida y ahora dirigida por Peter
Jackson, se la acusó de desgastante, insustancial, repetitiva, aburrida… En
pocas palabras, El
Hobbit: Un viaje inesperado (2012) era más de lo mismo, pero
decepcionante a la vez. Sin embargo, muchos, o por lo menos aquellos quienes
crecimos con la obra nos declaramos a su favor, la verdad no es tan desastrosa
como la han calificado, simplemente es igual que las anteriores, después de
verla, sentí como después de casi tres horas frente a la pantalla, disfruté en
pleno la gran oportunidad que nos ofrece el Cine y poder ver de nuevo, recreada
la Tierra Media y formar parte como espectador de la nueva travesía de Bilbo
Bolsón (Martin Freeman).
Para terminar considero
que El Hobbit: La
desolación de Smaug. no es una mala película, todo lo
contrario: conserva para bien, la grandeza visual de sus escenarios naturales propios
de leyenda; un gran trabajo de maquillaje y vestuario, que nos permite, al
igual que las anteriores, transportarnos a la Tierra Media; con emocionantes
escenas de acción y uno que otro guiño a las anteriores entregas, todo esto
sumado al reparto de otros protagonistas en el film Tauriel (Evangeline Lilly),
Légolas (Orlando Bloom), aparte de (repito y no me canso) la presencia del
Smaug, que como lei motiv nos deja con la boca abierta de con solo verlo.
Por todo esto y mucho más, en POP CORN CINEMA otorgamos a
El Hobbit: La desolación de Smaug. 4 Tickets Dorados de 5 como mayor calificación.
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